Calasanz expone un conjunto de razones a dicho cardenal por ser el ponente de la comisión pontificia encargada de estudiar la aprobación de las constituciones y la conveniencia o de conceder a las escuelas pías votos solemnes con categoría de orden religiosa.
Los historiadores de la orden han calificado siempre a este documento como “obra maestra”, “canto original a la tarea educativa”, tesis doctoral” de Calasanz.
El alegato no solo desarmo al cardenal Tonti, sino que lo convirtió en un entusiasta de la obra de las escuelas y en amigo personal de Calasanz.
Los argumentos personales o convicciones de Calasanz son quizás la parte más conocida y reproducida del documento.
Muy Digno, por girar en torno a la salvación.
Muy noble, por ser menester angélico y divino.
Muy meritorio, por establecer y poner en práctica, con plenitud de caridad de la iglesia.
Muy beneficioso, por ayudar a todos en todo.
Muy útil, por los cambios de vida efectuados.
Muy necesario, para esa corrupción de costumbres y ese predominio del vicio que reinan en los de educación mala.
Muy enraizado, en la naturaleza de todos los hombres.
Muy conforme a razón, para príncipes y ciudades a quienes trae mucha cuenta tener vasallos y ciudadanos morigerados, obedientes y bien disciplinados.
Muy de agradecer, por parte de los hombres, que lo aplauden unánimes y lo desean en su patria, también por parte de dios, mucho más que la conversación de un pecador.
Muy agradable para quien sea llamado a laborear en esta viña y a trabajar en esta mies tan abundante.
Muy glorioso para los religiosos y para aquellos que lo favorezcan y promuevan con su autoridad y mercedes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario